Si una palabra define a Carolina Tosi es la pasión. Cada vez que encara un proyecto, ya sea elaborar una tesis post-doctorar, escribir un libro de cuentos u organizar una ponencia, pone en él toda su capacidad y concentración, tanto a nivel intelectual como físico y emocional.

Este apasionamiento se le nota cuando habla de su nuevo libro, Escritos para enseñar -Paidos Educación-, el cual estará presentando junto a Mercedes Carbani el próximo sábado 19, a las 16:30, en la 15º Feria del Libro Mar del Plata, Puerto de Lectura.

Días antes de dicha presentación, y en un alto de la intensa agenda que desplegará en la ciudad en el marco de su visita -que incluirá su participación en el ciclo El inventor de historias, en la sala Payró del Centro Provincial de las Artes- Tosi dialogó con Revista Leemos sobre su nuevo libro y el rol de los llamados textos escolares en la historia del sistema educativo.

“Son libros que en general son menospreciados y poseen un tinte negativo, pero no debería ser así -afirma, enfática, en el comienzo de nuestra charla-. No solo no son un género menor sino que permiten dilucidar aspectos muy complejos, controvertidos e importantes para la historia de la educación, como los métodos de enseñanza, las prácticas de lectura y escritura, los lineamientos ideológicos, las representaciones sociales y los modos de transmisión el saber. Todos esos aspectos tan complejos están vehiculizados en los materiales didácticos”.

Como se recordará, Tosi es doctora en lingüística y magíster en análisis del discurso, además de profesora y licenciada en Letras por la Universidad de Buenos Aires. Actualmente, se desempeña como investigadora adjunta de Conicet y como docente de Corrección de Estilo de la carrera de Edición de la UBA. Dicta seminarios y cursos de posgrado y cuenta con una larga trayectoria en el abordaje del discurso pedagógico, tanto en libros de texto como en recursos digitales, en vinculación con las políticas ministeriales y editoriales.

“Escritos para enseña”, el nuevo libro de Carolina Tosi.

En ese marco, la vinculación con los libros de textos le llega a través de distintos canales: por un lado, trabajó varios años como editora y vivió en carne propia lo que significa tener que trabajar textos sin tener demasiado tiempo para reflexionar sobre su contenido y la forma de transmitirlo. Por otro lado, su labor como docente en colegios secundarios también la puso del otro lado del mostrador en lo que a esos mismos libros se refería.

Es por ello que, a la hora de definir el tema de la tesis de su post-doctorado, no tuvo dudas: quería estudiar los aspectos discursivos de los libros de texto, con el doble objetivo de entender un poco más ese universo tan fascinante y realizar algún aporte para la labor docente. Esa tesis es la que ahora, reelaborada, llega a las librerías de la mano del sello Paidós Educación.

“Creo que este libro no solamente hace un recorrido conceptual y analítico de lo que yo llamo los modos discursivos del saber sino que también puede ser una herramienta práctica para reflexionar y examinar nuestras prácticas docentes” adelanta en diálogo con Revista Leemos.

En su libro, Tosi se detiene a analizar algunas herramientas recurrentes a las que han apelado las editoriales pero que no siempre han merecido un análisis detenido. Por ejemplo, el uso de determinadas fuentes -bastardillas o negritas- para destacar ciertos conceptos sobre otros o la estrategia de colocar en la parte explicativa de los manuales aquellos conceptos que representan lo “verdadero y asertivo” mientras que, simbólicamente, las voces “ajenas” se incorporan en los márgenes.

Otro dato llamativo detectado por Tosi está relacionado con los cambios que el advenimiento de la democracia produjo en el sector. “Hasta ese momento -explica- los libros de textos tenían una impronta academicista. En cambio, el retorno de la democracia, el ingreso de multinacionales al mercado y la sanción de la Ley de Educación del ’93, producen un cambio en el destinatario y en la configuración del libro de texto.

“A partir de entonces -continúa- apuestan más a la fragmentación y a que en esos libros escolares haya ecos de discursos de los medios y de las nuevas tecnologías. Eso también se ve en la disposición de escenograías enunciativas nuevas, como por ejemplo una página de manual que puede leerse hoy como una página web o como un artículo de divulgación científica, como un tuit o como un juego”.

Por último Tosi considera que uno de los aportes más valiosos de su libro viene de la mano de un apéndice en el que se plantean estrategias de facilitamiento. “Es una propuesta pedagógica centrada en el discurso -describe-: es decir, no centrarnos solo en lo contenidista sino en cómo el contenido aflora y cómo se construye en el texto”.

En este contexto, la autora entendió que el rol de los docentes se ha complejizado. “Durante décadas, los libros de texto funcionaron a modo de estructuradores de la clase -describió-. Hoy, en cambio, los docentes pueden apelar a una multiplicidad de materiales, lo que hace que el libro de texto pierdan ese protagonismo y que los docentes cumplan un rol de mediadores entre sus estudiantes, algo así como administradores y guías en el uso de materiales que pueden ser impresos o digitales”.

En cuanto a su presentación de la Feria del Libro de Mar del Plata, Tosi explicó que “la idea es hacer un recorrido por los diferentes materiales de enseñanza que han acompañado a la educación a lo largo de la historia hasta llegar a la actualidad, plantear los desafíos e invitar a la reflexión de los docentes con respecto a los materiales que están circulando para dar clases. En otras palabras, charlar sobre los modos de leer y de enseñar, atentos a la nueva coyuntura social, educativa y tecnológica“, concluyó.

@limayameztoy