Con la excusa de un taller literario, un grupo de mujeres pobladoras de Sierra de los Padres se reunió para disfrutar de lecturas, escritura y mates. La segunda parte del taller será el registro de testimonios de los pobladores históricos de la zona para rescatar la memoria del terruño y plasmarla en un libro.
La propuesta de realizar un Taller de escritura expresiva partió de la Biblioteca Municipal de Sierra de los Padres a cargo de la bibliotecaria documentalista Jessica Flores para los vecinos de las comunas que integra la zona Rural oeste. Para darle forma, convocó a la escritora y docente Carolina Peleretegui y a la periodista Sandra López Maidana, ambas residentes de la zona.
La invitación era jugosa. “Vení a reencontrarte con tus palabras”. Lejos de los academicismos y retóricas gramaticales, la idea que las hacerse un tiempo-espacio para jugar con las ideas, activar la imaginación y mejorar la comunicación, sin importar el grado de acercamiento a la escritura. “Aflojar la mano” para redescubrir su propio campo de palabras.
Si bien la convocatoria era para adultos de toda la amplitud de géneros, llegaron a la mesa mujeres de todas las edades. Una de ellas trajo a su hija de 13 años que tenía ganas de participar, a la que aceptaron -aunque secretamente creyeron que tal vez no le resultara tan interesante. No obstante, su mamá dejó de venir por cuestiones laborales y la muchachita no faltó a un sólo encuentro. Y descubrieron un talento desplegado de creatividad, humor y fino sarcasmo entre sus palabras delicadamente hilvanadas.
La producción de las participantes finalmente fue de textos cargados de realismo, poesía, intensidad y compromiso. El nivel de plumas superó por lejos las expectativas de las talleristas.
Desde el 12 de agosto y todos los viernes de 14 a 16 se ubicaron las mujeres rurales alrededor de la larga mesa del salón de usos múltiples de la Delegación de Sierra de los Padres. Los recursos dispuestos para el trabajo literario fueron un manojo de ejercicios lúdicos y motivadores. Uno de los protagonistas de las clases fue Textus, pero merece un párrafo aparte.
Con ustedes, Textus
Un dispositivo diseñado y realizado por Sandra López Maidana que constituye un juego, un oráculo y en definitiva un desafío para armar textos con el azar como aliado. Una caja circular texturada y atravesada por la palabra Textus en castellano, en chino, en idish y en el idioma africano swahili. Su interior forrado por un lienzo negro contiene varios cientos (nunca fueron contabilizadas) de palabras extraídas de revistas, pegadas sobre una goma eva, barnizadas y luego recortadas una por una.
Existen varias leyendas acerca de su fabricación, que incluye haber sido creado por la periodista durante el cumplimiento de una condena por homicidio, aunque no se pudo confirmar el dato.
Como juego literario, Textus brindó palabras para confeccionar escritos individuales y en conjunto, que coparon la total atención de las participantes.
Como oráculo, se le pidió que emita un mensaje para esta nota, entonces dijo:
“Revista:
Su curso exclusivo de pasión a Campos nada comunes”.
Proyecto Rescate
La primera parte del taller constó de nueve clases para aceitar la herramienta de la escritura a modo de preparación para la segunda etapa. Este complemento tiene que ver con un proyecto de integración con la comunidad.
Se convocará a los habitantes de muchos años de residencia en la región para que expongan sus historias a las participantes. La vida, la lucha, el amor, la magia, la tierra. Sus palabras serán la fuente de la que se nutrirán los textos que formarán parte de un libro dedicado al rescate de la memoria de este lugar de tierra y cielos interminables en el que decidieron vivir.
*Biblioteca Pública Municipal Sierra de los Padres