Más allá del concepto de saga que por momentos parece inundar los escaparates de las librerías, hay personajes y escenarios de literatura que quedan grabados en la memoria de las y los lectores, que fueron construidos por sus autores con tal potencia que exigen una revisita y que muchas veces, se demuestra luego, esa potencia no se agota en un sólo libro.
Como no hablamos de continuidad en sentido estricto, estos personajes nos mantienen lejos de ese prejuicio cinéfilo que indica que “las segundas partes nunca fueron buenas”. A veces quienes somos lectores nos encontramos rememorando las vicisitudes que tal o cual protagonista de una novela atravesó en aquél libro inolvidable, y en muchas ocasiones surge la pregunta potencial a niveles superlativos: ¿Cómo seguiría la vida de este o aquél personaje después de su primera aparición literaria? ¿Qué más podría haber pasado en ese lugar?
Hubo, hay, autores que nos han dado el gusto. Se han hecho la misma pregunta y decidieron que esos personajes o esos escenarios icónicos volvieran para seguir contando, para albergar nuevas historias. Estos son los que seleccionamos junto a Libros de la Arena, nuestros recomendadores seriales:
El tiempo de las moscas, de Claudia Piñeiro (Editorial Alfaguara)
La nueva novela de Claudia Piñeiro, una de las autoras argentinas más leída y premiada en los últimos tiempos, retoma el personaje de Inés, la protagonista de Tuya que asesina a la amante de su marido.
Tras 15 años presa, Inés vuelve a las calles y a enfrentarse con una sociedad completamente diferente, con avances en los derechos de las mujeres, con antiguas estructuras que de a poco se van modificando y cuyo devenir se le hace ajeno.
En este tiempo, sólo hizo una amiga en la cárcel, La Manca, y con ella montan una especie de emprendimiento en el que una de ellas hace fumigaciones y la otra se dedica a la investigación, cual detective privada.
La detonación del conflicto aparece cuando una clienta les hace una propuesta que, si sale bien, puede cambiarles la vida para siempre.
En El tiempo de las moscas, Piñeiro vuelve a dar vida a una voz muy particular que quedó grabada en la memoria de sus lectores.
Quebrada, de Mariana Travacio (Editorial Tusquets)
En esta novela de Travacio el escenario se parte en dos. En los mismos paisajes desolados y rurales que la autora y psicóloga forense retrató en Como si existiese el perdón –con una violencia poética inolvidable-, en Quebrada hay un personaje que se queda, que elige quedarse. Y uno que se va.
Lina quiere, tiene que irse. Se da cuenta de que vive en una piedra donde nada crece, nada más que hambre, pobreza, frustración, enojo y soledad. No hay nada realmente vivo ahí. Ese es el escenario en el que su esposo, Relicario, se queda, porque allí quedaron sus muertos y “a los muertos no se los abandona”.
En la novela anterior, ambientada en esta quebrada ventosa y árida, los hombres vivían la vida y la muerte sin pasión, sin convicción, sin apego. Con un relato febril, la autora narra un malentendido, un asesinato y una búsqueda de venganza. En este último libro, el escenario sigue contando, pero se le suma otra voz, la del viaje sin camino que emprende Lina y que fue parido por ese paisaje irredento.
El significado del fuego, de Kike Ferrari (Editorial Alfaguara)
El señor Machi había sufrido un inquietante percance en su Que de lejos parecen moscas, la premiada novela de Kike Ferrari. Con una personalidad brutal, de pronto debió temer por sus negocios, las lealtades de sus hombres y su propia historia.
En El significado del fuego, conocemos otros aspectos de su vida a través de la voz de otros: el fiscal a cargo del caso, el juez, el comisario, la esposa, los hijos, los amigos, los socios del restaurante, hasta los guardias de seguridad del country y sus innumerables compañeras sexuales.
En la primera novela, Ferrari había logrado un ritmo demencial y en esta vuelve con el pulso endemoniado de los acontecimientos que protagonizó el Señor Machi y que conforman una historia de corrupción, mafia y poder de un país en decadencia.