por Carolina Bugnone
ESMA es una novela gráfica, pero sobre todo es un libro que se permite jugar con el relato de un periodista de ficción (¿ficción?) que cubre el mega juicio contra la ESMA, y sus sensaciones, pensamientos, charlas.
La respiración oprimida por los pasillos, escaleras y espacios al recorrer la ESMA, el agobio, su presencia en el pronunciamiento de las condenas en la vereda de Comodoro Py, junto a los familiares y sobrevivientes, los carteles con sus fotos y los cantos de justicia.
Se permite jugar, digo, porque con el horror no se puede jugar a nada, pero este libro lo hace a la vez que detalla con exactitud fechas, nombres, lugares, represores y víctimas; es un verdadero documento histórico, armado con claridad y con imágenes muy expresivas que completan la obra.
Acerca del porqué de ESMA, dice el autor “Desde el secuestro pasando por el trato inhumano, la tortura, el robo sistemático de los hijos de los detenidos hasta la desaparición sistemática de personas en los llamados vuelos de la muerte; la ESMA se configura como un ejemplo paradigmático de la represión, solo comparable con los campos planificados por el nazismo”.
A pesar del inevitable peso y densidad de la temática, su estilo ágil, intercalado con ilustraciones, y su lenguaje coloquial hacen que este sea un libro de extenso valor para el acceso a este pasaje de nuestra historia por parte de cualquiera. Y, especialmente, por parte de los jóvenes, quienes están más lejos generacionalmente, y por lo tanto de las vivencias de aquellas épocas.
Se puede leer en unas horas, pero se leerá en verdad en un tiempo lento, de deglución, de procesamiento de cada una de las historias que aquí se reúnen, un tiempo de relectura y de precisar detalles. La particularidad de la dictadura que nos tocó padecer en los años ‘70 hace que sea un pasado en presente continuo: los restos de los secuestrados están en su mayor parte desaparecidos; son secuestros vigentes. Secuestros que empezaron y no terminaron jamás. Las personas robadas, muchas de ellas, lo siguen estando. Y los y las sobrevivientes llevan en su cuerpo y en su corazón el horror.
La temporalidad rota encuentra en libros como éste un modo de curar, de intentar curar, los dolores que nos dejó la atrocidad; sabiendo que la única forma de no dejar morir la memoria, es, en un sentido, manteniéndolos vivos.
* Carolina Bugnone coordinará la presentación de la novela gráfica “ESMA”, de Juan Carrá e Iñaki Echevarría este domingo a las 18 en la Feria del Libro de Mar del Plata -Alberti y Sarmiento-.