El músico, comunicador y escritor Fabio Herrera presentará este sábado su libro El pasante del suplente del letrista, mucho gusto. La cita será a las 21.30 en el Bar cultural Blohf Latinoamérica, ubicado en la esquina de Santa Fe y Falucho, con entrada gratuita.
Se trata de un cancionero que incluye las letras de 49 canciones escritas por el autor de Las formas del regreso, que además conduce el programa radial La Oreja Pública, por Radio Universidad y que este domingo cumple 13 años al aire.
Las composiciones están hechas en distintas etapas y tiempos, corregidas en la actualidad y no responden si no, a una elección personal.
Durante la propuesta de este sábado de El pasante del suplente del letrista, mucho gusto el autor será presentado por Carlos Enrique Cartolano y luego habrá una presentación musical donde compartirá escenario con Marcelo Sanjurjo, Charly Vela y Pablo Olmedo, quienes interpretarán algunas canciones que se incluyen en el libro.
A modo de ejemplo, 5 menos algo
El llanto no evidencia una tristeza
tampoco un río seco sin su espejo
a veces lo real es un reflejo
ambiguo como quien grita certezas
el tris irrepetible no regresa
y cada vez hay algo que se pierde
por más trivial que sea nunca vuelve
ayer perdió lo simple la simpleza
se sabe que “Mathema” es la belleza
y que la flor del tallo se desprende.
La búsqueda incapaz de lo infinito
estrega sus anuncios al mercado
la muerte es un pernío registrado
que nunca fue avalado por escrito
experta en asfixiar mil astrocitos
al mismo tiempo que abre las ventanas
el mar besa en la frente a las escamas
así enmudece el cauce de los ritos
la forma es el esbozo de un maldito
que ruge como un eco de campana.
Mirar un arcoiris cuando ocurra
latir cada respiro como propio
¿qué mueca hará el señor del microscopio
sabiendo que no hay quien se la descubra?
él dio color a nuestra sangre rubra
con la “Piedra de Ajá” de los volcanes
la farsa de los peces y los panes
encontró en la confusión quien la recubra
y al oro dio poder para que aturda
hasta la fibra de los huracanes.
¿Cómo será el andar sin la distancia
por entre los vectores de un sol ciego?
confío a mi memoria la sustancia
del que soy, que el que fui
siempre fue a menos.
La sortija no elige a quien regala
otra vuelta “de balde” calesita
supone que tal vez lo necesita
el parecer del viejo y su desgana
cualquier tesoro tiene su reclama
nadie exige el del lago Guatavita
el día que un voraz se lo permita
dejará su respiro bajo el agua
lo innegable es tal vez lo que se carga
junto a la opacidad gradual del día.
Aquellos que examinan la respuesta
con ímpetu de empíreo subjetivo
por su ego horrible monstruo enfurecido
sabrán que tienen que pagar la apuesta
hay dos niñas que han leído el “Avesta”
pero hablan solo “zend” indescrifrable
hay un instante que entrega la tarde
donde cualquier vocablo solo resta
porque es cuando la sombra se recuesta
sobre el barrido que dejó el escarde.
¿Cómo será volver sin la distancia
bajo las pretensiones de los cielos?
no se ve en los espejos la ignorancia
lo que queremos ver
es lo que vemos.
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