Aunque debido al temporal de lluvia el  encuentro sobre el universo Harry Potter  que iba a realizarse este sábado se suspendió, seguimos disfrutando de las reflexiones de Cristina Alemany y Leonel Teti sobre el boom de la literatura joven y la impronta de la saga del mago en la formación de nuevos lectores.

La juventud tomó por asalto el mundo editorial. Harry Potter fue la punta de lanza de un movimiento a nivel mundial que dio puntapié a un segmento literario… y que no para de crecer. Así se refleja en las voces de Cristina Alemany y Leonel Teti, dos referentes de las editoriales que expresan más cabalmente este desenfreno lector.

Cristina Alemany dirige la editorial #numeral, especializada en libros para jóvenes, y preside la Comisión de Literatura Juvenil en la Fundación El Libro. Además, es autora de libros infantiles/juveniles  y permanentemente da charlas y conduce encuentros sobre el segmento en el cual se ha especializado desde hace 12 años.

Por su parte, Leonel Teti es editor especialista en literatura juvenil y en comunicación digital. Es el editor responsable del sello VRYA de V&R Editoras, en donde se encarga de la coordinación de todo el proceso editorial y de la búsqueda y selección de títulos para el catálogo.

Ambos estaban invitados al encuentro “Magia y literatura: ¿Qué hay de nuevo en el universo Harry Potter?”, que iba a realizarse este sábado pero que debió suspenderse debido a las inclemencias climáticas que castigaron la zona en las últimas horas.

No obstante, ambos dialogaron con Revista Leemos y reflexionaron sobre el rol de las editoriales en los modos de leer de las y los jóvenes, el papel que la saga Harry Potter jugó en el crecimiento exponencial de las dos últimas décadas y qué les apasiona de aquello que llamamos literatura joven y que en el mundo se conoce como Young Adult.

 -Desde tu experiencia, ¿cómo ves el desarrollo de este segmento en nuestro país?

Leonel: Sin lugar a dudas, la literatura YA ha mostrado un crecimiento constante los últimos años. Es fácil de comprobar si nos acercamos a una librería y vemos que, la gran mayoría, ya cuentan con una sección de “literatura juvenil”, cuando antes esos libros se encontraban en la sección infantil. Además, es muy visible cómo aumentó la oferta. El promedio de libros YA publicados cada mes sigue creciendo.

-Cristina, tenés una larga trayectoria trabajando con las y los chicos…

Cristina: Si, hace muchos años que trabajo con los lectores juveniles. Al principio fue un tema de línea editorial, una cuestión laboral, pero a medida que me interné en este tipo de literatura y empecé a interactuar con los lectores ya no me quise ir más y me dediqué a especializarme y a meterme cada vez más en su mundo.

-¿Por qué te quedaste?, ¿Qué es lo que te apasionó?

Cristina: Me gusta que son muy francos, muy pasionales, de pronto tan fanáticos que su vida pasa por un libro o un personaje. Son lectores constantes, ávidos por novedades, información… me gusta la frescura y el desenfado con el que actúan frente a los libros juveniles pero también frente a los clásicos y a los grandes autores. No le tienen miedo a nada. Creen que todo el mundo se puede leer y comentar online, y eso los hace grandes facilitadores de lectura, porque otros chicos quieren imitarlos. En esto lo que ayuda mucho es la lectura en comunidad, la recomendación, debate y crítica entre pares, lo que genera una lectura por gusto y placer, no por obligación o no desde una perspectiva adulta. Ellos son libres para elegir y decidir lo que leen, dicen honestamente si les gusta o no y sobre esa base los libros van corriendo de boca en boca, solo que hoy, ese boca a boca está dado por la comunicación online, que es donde más socializan los jóvenes.

-En general, el público reconoce que Harry Potter puso a leer a una generación entera en momentos en que se dudaba del interés de los chicos por la literatura…

Leonel: Harry Potter claramente marcó un antes y un después en los lectores. Fue una de las primeras series juveniles que llegó masivamente a todo el mundo. Rowling supo innovar con su obra, puso temáticas muy atractivas para los chicos (y no tan chicos), y las ejecutó de manera magistral… Y también fue sumamente importante en mi vida como lector. Fue la primera vez que me topé con una obra que podía leer como quería, a mi tiempo, interpretando lo que quería interpretar. No había un docente que me marcara una ruta de lectura; en todo caso, estaban mis amigos, y juntos debatíamos distintas interpretaciones del libro, especulábamos con lo que iba a suceder en los siguientes tomos. Fue una experiencia única e inolvidable. Harry fomentó en mí el amor por la literatura juvenil y los libros en general.

Cristina: Harry Potter es el máximo ejemplo de lo que pasa ya con dos generaciones de lectores. Sus fans leen, ven las películas, siguen a los actores, a los personajes, hacen cosplay, coleccionan ediciones u objetos que tiene que ver con la saga, participan de encuentros y debates… hay todo un mundo de Potterheads que siempre están listos para participar a pesar de que ya va a hacer veinte años de que se inició la saga. Tenemos lectores de siete u ocho años, y otros de más de treinta, y todos unidos por una única pasión, que es la saga del mago. A partir de este fenómeno se entiende todo lo que vino después, con sagas como Crepúsculo, Los juegos del hambre, Divergente, Percy Jackson, etc.

Leonel: Yo creo que sigue teniendo esa repercusión porque, para mí, se convirtió en un clásico moderno. Atraviesa generaciones. No importa la edad que tengas, ni si sos varón o mujer. Creo que ahí radica la clave del éxito. Además, la temática que presenta la serie no está atada a ninguna moda, es un concepto que se sostiene a lo largo del tiempo.

¿Cuál te parece que es el principal aporte de esta saga a la literatura?

Leonel: Creo que lo que dejó Rowling en muchos autores YA es esa idea de no “encasillar” al lector. Es cierto que en libros de fantasía, uno puede ver muchos guiños a Harry Potter. Pero si vamos más allá de la temática, lo que Rowling demostró es que los libros para jóvenes pueden ser muy exitosos, que los chicos leen y que una novela juvenil no es solo para un público adolescente, que un adulto también puede disfrutar de esas historias. Y hoy, me encanta ver cómo muchos autores sí escriben juvenil, pero en sus obras notás cómo apuntan a un público universal. A fin de cuentas, eso es la literatura, ¿no?

Más allá de haber leído o no la saga de Harry Potter, nadie puede omitir el hecho de que la autora inglesa J.K Rowling supo dejar la impronta del mago marcada a fuego en varias generaciones de lectores.