Hay algo indescriptible en la prosa de Chimamanda Ngozi Adichie que figurativamente se enrosca en nuestros cuerpos y nos transforma profundamente. Algo alrededor de tu cuello (2018), su antología de cuentos editada en Argentina por Literatura Random House, no es la excepción a la regla y siento que hay mucho de acierto en el nombre del título cuando nos encontramos con un contenido que da voz a personajes femeninos que enfrentan dificultades tanto en su tierra natal como en situaciones donde eligen o se ven forzadas a emigrar.
Tal vez el nombre de esta autora nigeriana les suene por sus charlas TED: Todos deberíamos ser feministas y El peligro de la historia única, ideas que luego mutaron al papel al transformarse en ensayos editados y publicados en formato de libros de bolsillo. Estas charlas y ensayos esbozan nuestros primeros acercamientos hacia Chimamanda: una voz femenina africana imponente, inteligente, feminista y con el maravilloso don de la palabra exacta para contar historias. Historias que deben provenir de vivencias personales, de mujeres que conoce, de noticias que le llegan de los medios, de un colectivo de personas migrantes alrededor del mundo que buscan países donde cumplir sus sueños sin dejar de lado sus raíces. Chimamanda vive entre Estados Unidos y Nigeria, entre el país que extendió sus alas y el país que le da raíces.

La atmósfera creada por la autora en sus cuentos es sumamente verosímil: historias de migrantes, de tradiciones ancestrales, de enfrentamientos étnicos y religiosos, de diferencias políticas. Las protagonistas son mujeres, algunas con ideas y convicciones firmes, otras en busca de oportunidades y un camino propio. En algunos momentos del texto estamos en Lagos, centro económico y cultural de Nigeria, en otros estamos en Sudáfrica en un retiro de escritura para artistas africanos y en muchos otros rondamos por conocidas ciudades estadounidenses.
Nos encontramos con que lejos de haber cuatro estaciones en Nigeria o una variedad amplia de climas podemos dividirlo en estaciones húmedas o secas como el Harmattan. Que hay diferentes grupos étnicos, como en todo el continente africano, que poco tienen que ver entre ellos como Hausas e Igbos. Que hay costumbres religiosas propias tanto como dominio del cristianismo y el islam. Que Nigeria fue atravesada por una guerra civil sangrienta entre fines de los sesenta y principios de los setenta al dividirse en dos y proclamar a la región suroriental del país como un estado independiente llamado Biafra.
Chimamanda logra lo que yo denomino un verdadero viaje en papel, una inmersión tan ficcional como cultural que nos deja algo más que la experiencia ya de por sí mágica de leer historias. Un viaje físico es tan intangible como un viaje en papel: en el primero absorbemos experiencias con nuestros sentidos, en el segundo las creamos en nuestras mentes. En tiempos dificultosos para emprender viajes por el espacio los libros salen al rescate nuevamente para llevarnos lejos en las comodidades del hogar.
En cuanto a los cuentos del libro tengo uno favorito y es “una experiencia privada” donde se narra el encuentro en un contexto desafortunado de una muchacha igbo de familia cristiana, Chika, con una mujer musulmana hausa. Unidas por la búsqueda de sus familiares en medio de un conflicto étnico-religioso se ayudan mutuamente dentro de sus posibilidades: Chika con sus escasos conocimientos en medicina y la mujer hausa con su fe, su tranquilidad y su conocimiento del lugar en el que se encuentran. Narra el encuentro de dos realidades en Nigeria: quienes tuvieron la oportunidad de viajar y conocer otras culturas, estudiar y vivir una vida más o menos acomodada, frente a habitantes arraigados a sus tradiciones, a profesiones de baja cualificación, a la vida en las calles de un pueblo o ciudad que no ha sido dominado (aún) por costumbres extranjeras. La dualidad presentada en este relato refleja muchas veces las tendencias globales a dividirnos y cómo, a pesar de esto, logramos unirnos.
Para seguir leyendo a Chimamanda recomiendo sus novelas Americanah, de tintes autobiográficos y Medio sol amarillo, que narra en profundidad el surgimiento, desarrollo y declive de Biafra y la guerra asociada a este conflicto político y étnico. Ambos libros fueron editados en Argentina también por Literatura Random House.